miércoles, 12 de septiembre de 2012

Debe saber de mi


Debe saber que deliro y antes de dormir me asustan algunos anhelos. Que por las mañanas paso corriendo la avenida para que no me atropellen el sueño matutino. Que el frío es mi desayuno. Que mi atrapasueños es bipolar. Que me saca de quicio que no me dejen dormir. Qué me gusta cantar en la ducha. 
Mi color favorito es el arcoiris, pero odio el rosado.
Que cayo lo que siento, que escribo lo que pienso.
Mi banda sonora es la misma de Amelie. 
No se si deba saber pero le comento que odio el trasmilenio a las 6 de la tarde, que no veo de lejos y que me gusta el olor del aerosol.
No digo mucho palabras que luego no se pueden explicar cómo "te quiero". A veces doy explicaciones sin que me las pidan. Que soy un poco despistada y que hablo golpiado. Que estúpidamente hablo con mi perro, que estúpidamente hablo demasiado. Que me gusta su sonrisa y que me gusta besarla. Que sufro de rinitis y migrañas y, entre semana, de insomnio. Que me gusta morder a la gente y una que otra vez hacerlas reír. Me gustan más los chocolates que las gomitas, que no puedo con la comida picante y soy amante del tekila con sal y limón. 
Tal vez deba entender que no me puede entender, que no soy fácil ni docil, qué mi ternura está atada y que no tengo peluches. Que me enamoran los besos, pero solo por un momento. Que escribo cursilerias que no llevan a nada.
Seguramente ya se dio cuenta que me gusta como habla, que me gusta su mirada. 
Debe saber también que algunos piensan que tengo un grado elevado de locura y que yo pienso que soy tan cuerda que me aburro. Que mis zapatos están tirados por toda la casa, que odio lavar la losa y tender la cama, que guardo lo que me regalan y que tengo muchas cosas guardadas.
Odio el chocolate muy caliente y por épocas como un helado diario. Que no me gustan las promesas incumplidas y que detesto esperar.
Me gusta dedicar canciones mentalmente y tomar fotos.
Que extrañamente el sonido de su voz me libera y su vida me apasiona.
Que no pretendo asustarlo, que pretendo sorprenderlo.
Que nada de lo que digo ahora tiene sentido pero aún así todo esto debe saberlo y que el resto tendrá, en algún momento, que conocerlo.